Archivo del sitio

Sé tu propia marca

descarga323

“Me puede gustar un hombre tanto como una mujer. Me seducen las mentes, me seduce la inteligencia, me seduce una cara y un cuerpo cuando veo que hay una mente que los mueve que vale la pena conocer. Conocer, poseer, dominar, admirar. Yo hago el amor con las mentes. Hay que follarse a las mentes.” – Dante en Martin (Hache)

-¿Crees que la gente es mala por naturaleza?
-No, simplemente donde tú ves un 10 yo veo un 0
-No entiendo a qué te refieres
-Sí, verás. Cuando tú conoces a una persona partes de la base de que es un 10, y poco a poco te va decepcionando hasta que piensas que es un 0. Yo, por mi parte, cuando conozco a una persona la veo como un 0 que tendrá que demostrarme, si quiere, que puede ser un 10.”

Con esto os quiero hablar de lo que últimamente ya no se hace. Estoy hablando de follarse a las mentes, de los ceros que se convierten en dieces, de los dieces que te recuerdan por qué hay personas por las que estaríamos dispuestos a cualquier cosa a cambio de nada. Hablo de las mentes maravillosas.

Y tras encontrarme con toda clase de gente, comprendí que cuando esperas algo de alguien y ese alguien te da exactamente ese algo, es que has conectado a la perfección, aunque sea por un breve instante, con otra mente. Y os puedo asegurar que  ese instante es maravilloso e indescriptible y no tiene precio. De hecho, es probable que sea una de las pocas cosas que no tienen precio hoy en día.

Vivimos en el siglo de las distancias cortas y las relaciones a distancia y todavía no hemos entendido que basar cualquier relación en un aspecto físico significa firmar de antemano un contrato de caducidad. Porque hemos dejado de hacer el amor con las mentes y hemos reducido la curiosidad a un montón de sábanas.

¿Pero y qué hay de lo que mueve al cuerpo? ¿Qué hay de vosotros? Sí. ¿Qué hay ahí dentro? ¿Algo que merezca la pena ser contado? ¿Hay algo en vosotros que un ciego sería capaz de ver?
Me refiero a eso que os mantiene despiertos desde las ocho de la mañana hasta a las tantas de la madrugada, lo que hace que los lugares a los que vais sean un poco diferentes a vuestro paso y lo que hace que las demás personas se pregunten por qué no os han conocido antes, porque les habéis cambiado en algo la vida. Me refiero a lo que marca la diferencia entre una col de Bruselas y una persona. A eso que hace que a veces, sin conocer de nada a alguien, digamos que hay ‘feeling’, músculos y curvas aparte. Me refiero a las piezas de un puzzle cuando encajan. Me refiero a ti, lo que te hace a ti, a tu marca. Cada uno de nosotros somos una marca diferente y única.
Por eso creo que los extremos se atraen, porque a veces la única manera de encontrar el equilibrio es encontrar una mente maravillosamente opuesta a la nuestra. Por eso creo que hay mentes que encajan a la perfección. Por eso hay que follarse a las mentes.

47042d4292c5a330ca47a233498e3e57

Por eso os invito a intentarlo, a no parar de hacerlo si sabéis de lo que hablo. A ser ese alguien de quien otro alguien espera todo, y darlo todo. Darlo extremadamente todo. Siendo tu, siendo tu propia marca no siendo una copia de los demás, entregando todo lo que tienes. Os invito a trabajar eso, esa parte de vosotros que no se ve pero que marca la diferencia entre vosotros y los demás, porque lo último que se arruga siempre es la inteligencia. Hacedlo, porque siempre es mejor compartir cuarenta años de cama con alguien con aspiraciones mentales que con alguien con la mente aspirada. Sí, porque a buen entendedor pocas palabras bastan. Dejémoslo en que hay cabezas que valen miles de kilómetros, y otras que no valen ni una parada de metro, por supuesto. Y espero sinceramente que la vuestra sea una de las primeras.


Os invito a que os atraigan las mentes que ven soluciones ante los problemas, las que saben lo que es importante y lo que es accesorio, las que nunca tienen suficiente. Bailad con las mentes claras que esconden algo que no comparten con cualquiera y aquellas capaces de guardar un secreto y no te traicionarían nunca, bailad con las mentes que son como la heroína.
Buscad las mentes que cambian el mundo porque están diseñadas para ello y no saben hacer otra cosa, las mentes que te retan a hacerlo todavía mejor cuando las cosas no pueden ir peor de lo que van. Acercaos a las mentes que son como un bidón de gasolina esperando a que alguien encienda una cerilla, porque llegado un momento os daréis cuenta de que ese es el tipo de mente con las que nunca te cansas de hacer el amor, o lo que sea que se hace ahora.


Os invito a mirar en las mentes que encuentran en la adversidad una manera de hacerse más fuertes, las que van de frente porque los perfiles sólo muestran la mitad, las que hacen que no puedas consumirlas de manera responsable, las que han comprendido que la vida es tan corta que si no haces lo que quieres al final es como si no hubieses hecho nada.


Os invito a que hagáis algo de lo que nunca os vais a arrepentir. SÉ UNA PERSONA 10, SIENDO TU PROPIA MARCA.

enamor

 ECDG//JAL