ENCERRADOS.

Un día más, un día menos.
No sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos. El ser humano es así.
Quien nos iba a decir que el 2020, nos iba a deparar esto, que parece una película de Hollywood, y como no, la realidad siempre supera a la ficción.
Ya nos queda menos.
Menos para abrazarnos, para mirarnos a los ojos, cara a cara, sin una pantalla por el medio.
Para tomarnos una cerveza en la terraza con los amigos, y hablar de cómo vamos a solucionar el mundo, aunque sepamos que poco podemos hacer.
De conversaciones en las escaleras de los patios hasta las mil comiendo unas pipas con sal o tijuana, que más da, si lo que te mola es la compañía.
De escuchar música con los cascos a todo volumen andando por la calle y pensar que estas en un videoclip.
De sentarte en un banco porque si, sin motivo.

Ya queda menos.
De volver a nuestra mesa en el bar de siempre que ha sido testigo de tantos momentos.
De pisar la arena y ver el mar con su furia y tu con tranquilidad.
De pasear sin miedo y sin prisas, sin ir a contrarreloj.
De volver a tener acumulados cien capítulos de mil series porque no tienes tiempo, porque tienes otros planes.

Hemos perdido nuestra libertad y aún así no toda, aunque nos parezca que si.
Por favor recordar esta sensación cuando todo acabe, y no seamos idiotas.

Los pequeños detalles son los más grandes, las personas que nos rodean y nos hacen la vida más llevadera, esas son a las que tenemos que dedicar toda nuestra atención, y sobre todas las cosas, dedícate a ti, a quererte y a ser feliz.

#JAL @jani91